Cuando un libro aparece en (casi) todas las listas de lo mejorcito del 2013 cree que merece la pena leerla. En esta historia parecen tres novelas en una: el libro de Daniel, el libro de Elías y el libro de Judith. Aunque los tres están relacionados por un mismo hilo argumental, aparecen saltos en el tiempo y el el espacio de gran magnitud.En el primero un estadounidense, hijo de cubanos, se pone en contacto con el detective Mario conde para averiguar lo ocurrido con un cuadro de Rembrandt que perteneció a su familia, judía de origen polaco que huyó de la persecución nazi. En el segundo nos adentramos en el Ámsterdam del s. XVII para conocer mejor al maestro y a un judío sefardí que trabaja en su taller. En la última parte volvemos a la Cuba actual donde el ex policía investiga la desaparición de una joven cuya familia, quizás tenga relación con el cuadro mencionado. Libro prolijo en todo: en personajes, en historias cruzadas y en reflexiones, quizás excesivo. Lo que más me ha gustado es la ambientación: he sentido el calor pegajoso cubano como si estuviera allí; además de ello he aprendido episodios históricos que desconocía y me he tenido que ir a internet para ver los cuadros de Rembrandt que tan bien se describen. En resumen, una lectura densa y compleja que hay que tomarse con paciencia pero que no decepciona.
BROWNIE 3 huevos 250 g azúcar 200 g manteca 125 g chocolate amargo 130 g harina 20 g cacao amargo 125 g nueces Fundir el chocolate con la manteca y entibiar. Batir ligeramente los huevos con el azúcar hasta que formen una espuma blanca. Tamizar la harina con el cacao y unir al batido junto con el chocolate fundido y tibio. Finalmente unir las nueces picadas groseramente colocar en un molde de 20 por 30 cm. O en uno circular de 24 cm diámetro. el molde debe estar forrado con papel manteca o aluminio y enmantecado Hornear a 180 ° C por 20 minutos. Dejar enfriar, antes de desmoldar. CORTAR EN CUADRADOS Información via Facebook